Familia Opisthorchiidae

Familia Ophistorcgidae
Especie: Clonorchis sinensis

Los opistorquídeos (Opisthorchiidae) son una familia de platelmintos parásitos de la subclase digenea. Estos afectan a los mamíferos y humanos que se alimentan de peces de agua dulce, y su infección puede llevar a un proceso carcinogénico, por lo que son llamados trematodos carcinogénicos.

En esta entrada trataremos la Clonorchis sinensis, también conocida como duela hepática. Que a pesar de considerársele como zoonotica (que no parasita de forma directa al hombre), tiene un peso importante a pesar de que el humano se infecta de forma accidental. 

Clonorchis es endémico en el Lejano Oriente, en especial en Corea, Japón, Taiwan y el sur de China, y la infección puede detectarse en cualquier región donde inmigrantes e individuos en general consuman pescado crudo o poco cocinado de áreas endémicas, o a veces camarones.

Morfología

El cuerpo es oval y aplastado y en la cara ventral destacan, salvo alguna excepción, dos ventosas: una ventosa anterior (llamada también oral, porque suele rodear a la boca) y otra ventral (llamada también acetábulo).  

El cuerpo está relleno de parénquima, que rodea a los órganos y el líquido corporal que circula entre sus células constituye el medio de transporte de diversas sustancias.

El aparato reproductor masculino está formado generalmente por dos testículos, de forma variada según la especie, de los que surgen sendos vasos eferentes (desde una parte central haacia otras más externas del cuerpo), para posteriormente unirse en un vaso deferente común, que se ensancha en una vesícula seminal y finaliza en un cirro (órgano de la cópula) extensible rodeado de glándulas prostáticas. En muchas especies, el cirro (y a veces la vesícula seminal) se encuentra dentro de un saco, denominado bolsa del cirro que se abre en un poro genital, situado por detrás de la ventosa oral.  

El aparato reproductor femenino está formado, generalmente, por un único ovario, situado habitualmente por delante de los testículos. Del ovario parte un oviducto corto que desemboca en una pequeña cámara denominada ootipo. En el ootipo desembocan, a su vez, los conductos de las glándulas de Mehlis, los conductos vitelinos provenientes de las glándulas vitelógenas y, en ocasiones, el receptáculo seminal. En algunas especies existe un conducto, denominado canal de Laurer (vagina vestigial de los Trematodos ancestrales), que parte del ootipo y se abre dorsalmente. Del ootipo parte, también, el útero; se trata de un conducto, a veces muy largo, por el que transitan los huevos producidos en el ootipo hasta su evacuación por el poro genital. El útero se abre al exterior por un poro que, en la mayoría de las especies, es común al aparato genital masculino.  

 Ciclo biológico

El ciclo de vida se inicia cuando fuentes acuíferas de agua dulce y de curso lento son contaminadas con heces de mamíferos minadas de huevecillos de C. sinensis. Estas fuentes acuíferas pueden ser ríos, lagos y arroyos, donde habitan los hospederos intermediarios.

Los huevos excretados que contienen en su interior la primera etapa larvaria (miracidio), son consumidos por caracoles que pueden ser de distintos géneros y especies, tales como: Parafossarulus manchouricus, Alocinma longicornis, Bithynia fuchsianus, Melanoides tuberculata, Parafossarulus sinensis, Parafossarulus anomalospiralis, Semisulcospira cancellata, entre otros.

Eclosión de huevos

El huevo en el interior del caracol eclosiona gracias a las enzimas digestivas del caracol, dejando libre al miracidio, que luego se desplaza dentro de este hasta alojarse en el hemocele y la glándula digestiva.

Allí comienza su evolución a la forma de esporocistos, luego se transforma en 17 días a una larva llamada redia y finalmente esta origina una gran cantidad de cercarias.

Muerte del hospedador

La reproducción de las redias se hace tan intensa que termina acabando con la vida del caracol.

Es así como las cercarías quedan libres en el agua. Luego, como son incapaces de nadar, se cuelgan con la cabeza hacia abajo en la superficie del agua y se dejan caer hasta el fondo.

Posteriormente vuelven a subir, repitiendo este movimiento hasta encontrar su segundo hospedero intermediario, el cual es un pez de agua dulce.

Entre los tipos de peces que puede penetrar están Pseudorasbora parva, Ctenopharyngodon idellus, Cyprinus carpio, Hypophthalmichthys nobilis, Carassius auratus, entre muchos otros.

En realidad la cantidad de géneros y especies de peces de agua dulce que pueden ser afectados es bastante alta y la mayoría de ellos son comercializados como alimentos en las zonas endémicas.

También se ha conocido que algunas especies de camarones pueden servir de hospedador intermediario secundario.

Segundo hospedador

Una vez que las cercarias consiguen al segundo hospedador, éstas penetran solo la cabeza, liberándose de la cola. Esta se enquista en la masa muscular del pez una hora después de haber penetrado y en un período de 20 días aproximadamente, maduran a la forma de metacercaria.

El pez o crustáceo infectado al ser consumido sin cocción por un mamífero susceptible, se infectará con las metacercarias de C. sinensis.

La metacercaria ingresa al sistema digestivo del hospedador definitivo y en el duodeno se liberará la larva, que posteriormente ascenderá en 1 o 2 días por el conducto biliar común, de allí a las ramificaciones de las vías biliares de segundo orden y en 30 días madura a la etapa de gusano adulto, donde comienzan a oviponer de 2000 a 4000 huevos por día.

Los huéspedes definitivos que sirve como reservorio pueden ser animales domésticos o salvajes, entre ellos se pueden mencionar perros, gatos, ratas, cerdos, comadrejas, tejones, entre otros.

Patogenia

Las infecciones leves por trematodos suelen ser asintomáticas. En la fase aguda, las infecciones más graves pueden producir fiebre, escalofríos, dolor epigástrico, hepatomegalia dolorosa, ictericia leve y eosinofilia. Más adelante, puede aparecer diarrea.

La colangitis crónica asociada con las infecciones graves puede progresar a atrofia del parénquima hepático y fibrosis portal. Si una masa de duelas obstruye las vías biliares, puede aparecer ictericia.

Otras complicaciones incluyen colangitis supurada, colelitiasis y, más adelante, un colangiocarcinoma (cáncer de los conductos biliares. Los veteranos de Vietnam que desarrollan colangiocarcinoma pueden haberse infectado con C. sinensis u Opisthorchis viverrini mientras servían en el sudeste asiático.

Epidemiología

Entre las principales zonas endémicas de este parásito se pueden citar el Sur de China, Corea, Japón, Taiwan, Valle del Río de Vietnam y una parte de Rusia.

12,49 millones de personas están infectadas con C. sinensis en China occidental, siendo la provincia de Guangdong la que presenta la más alta prevalencia con 16,4% de infección.

La tasa de muerte es de 1 por cada 5 casos.

Profilaxis

La prevención se resume en la cocción adecuada de los pescados de agua dulce y la buena disposición de excretas.

Diagnóstico mediante…

  • Examen microscópico de las heces

El diagnóstico de la clonorquiasis se basa en el hallazgo de huevos en las heces o los contenidos duodenales. Los huevos son difíciles de distinguir de los de Opisthorchis. En ocasiones, el diagnóstico se realiza a través de la identificación de duelas adultas en piezas de biopsia quirúrgica o en una colangiografía transhepática percutánea.

Otras pruebas no permiten arribar al diagnóstico pero pueden ser anormales, como la fosfatasa alcalina, la bilirrubina y el recuento de eosinófilos, que pueden estar aumentados.

A veces, la radiografía de abdomen muestra una calcificación intrahepática. La ecografía hepática, la TC, la RM, la colangiopancreatografía (CPRE) o la colangiografía pueden revelar irregularidades ductales y cicatrices.

Tratamiento

  • Pracicuantel o albendazol

El tratamiento de la clonorquiasis es uno de las siguientes:

  • Pracicuantel en dosis de 25 mg/kg por vía oral 3 veces al día durante 2 días
  • Albendazol 10 mg/kg por vía oral 1 vez al día durante 7 días

La obstrucción biliar puede requerir cirugía.

La prevención implica cocinar bien los peces y camarones de agua dulce procedentes de zonas endémica y no comer alimentos crudos, en vinagre, o en vino.



No hay comentarios:

Publicar un comentario